Su identidad se conoció esta mañana, aunque las autoridades no lo han revelado. Y aún se investigan las causas de la muerte.
Uno de los 14 condenados por el asalto armado al canal TC Televisión, ocurrido en enero de 2024, fue hallado sin vida en la Penitenciaría del Litoral. Su identidad se conoció esta mañana, aunque las autoridades no lo han revelado.
El interno, identificado como Jorge Antonio A.S., de 22 años, se encontraba en uno de los pabellones de este centro carcelario ubicado en las afueras de Guayaquil, donde el viernes cinco reclusos fueron encontrados sin signos vitales.
Sin aludir a su muerte, la Policía Nacional emitió un comunicado en X en el que indica, como una «actualización», lo siguiente: Mediante audiencia de juzgamiento del Tribunal Penal de Guayas, relacionados a un ataque armado a un canal de televisión en Guayaquil, las autoridades competentes determinaron la culpabilidad, dictando 13 años de prisión a Jorge A., alias «Jorgito» por el delito de terrorismo. Evento delictivo que se le atribuye al grupo armado organizado Tiguerones».
Según información preliminar, las muertes habrían sido causadas por tuberculosis. Sin embargo, el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de Libertad (SNAI) informó que las investigaciones continúan y que se realizan las autopsias correspondientes para determinar las causas exactas.
Familiares citan supuestos reportes forenses en los que se señalaría que la causa de muerte es por ahorcamiento, pero esto no ha sido confirmado por el SNAI.
Jorge Antonio AS formó parte del grupo de 14 personas sentenciadas por terrorismo tras irrumpir en el set de televisión de TC. Entre los procesados figuran un ciudadano venezolano y 12 ecuatorianos, incluidos dos hermanos adolescentes. Todos fueron vinculados a la organización criminal Los Tiguerones, liderada por alias Comandante Willy.
Los otros reos fallecidos tenían edades entre 22 y 37 años y cumplían condenas por delitos como delincuencia organizada, asesinato, robo, porte ilegal de armas, tráfico y terrorismo.
Este nuevo episodio se suma a la crisis carcelaria que enfrenta el país, con recurrentes hechos de violencia y deterioro en las condiciones de reclusión.
