En un intervención en locales de Quevedo y Buena Fe, en Los Ríos, que operaban fuera del horario permitido durante el toque de queda, Militares de Fuerzas Especiales, junto a la Policía Nacional y a otras instituciones del Estado, realizaron allanamientos que permitieron identificar una fiesta en honor a la Santa Muerte.
Al notar la presencia militar, los propietarios de algunos de los establecimientos intentaron bloquear el acceso, por ello, las autoridades realizaron el ingreso que sorprendió a los presentes.
En el sitio, se desmanteló el altar dedicado a la figura de la muerte, que fue destruido en presencia del propietario del lugar, quien no había justificado el evento durante los horarios en los que no está permitida la circulación de personas en ese cantón.
Además, se encontraron tres motocicletas sin documentación que podrían ser robadas, por lo que la Policía procedió a decomisar para iniciar las investigaciones que determinen su procedencia.
