Los grupos criminales implicados están identificados por la Policía, pero los esfuerzos se diluyen por decisiones judiciales. En Pascuales, hubo ocho muertos por extorsiones. Omar se enteró del asesinato de su hermano Luis Ángel B., de 42 años, mediante una llamada. El crimen ocurrió a las 08:53 del martes 10 de junio de 2025 en Pascuales, norte de Guayaquil.
La víctima vendía jugos y empanadas en una esquina, cuando le dispararon. Según reportes preliminares, él había sido extorsionado hace tres meses y tuvo que pagar USD 300 a un grupo criminal para que no atenten contra su vida.
El otro sicariato fue en Mucho Lote, perteneciente al distrito Pascuales. Un conductor de tricimoto murió acribillado. Minutos antes de ese crimen, ocurrió la masacre en el sector de Peca, que dejó cinco fallecidos.
En la matanza, los seis sicarios que también iban en tricimotos, dispararon 59 veces con pistolas calibre 9 milímetros. Las víctimas tenían entre 29 y 63 años de edad y estaban en un paradero de estos vehículos usados en la zona.
Según fuentes policiales, en Pascuales existe una pugna entre dos facciones de Los Tiguerones: Igualitos y Fénix, que buscan el control de las extorsiones en ese punto de Guayaquil. Uno de los cabecillas es alias Ñoco, a quien sus rivales intentaron matarlo en una salsoteca de Bastión Popular el 30 de mayo. Escapó, pero una mujer murió y ocho personas quedaron heridas.
Luego de ese ataque -según una fuente policial- alias Ñoco empezó a blindarse y adquirió fusiles. Pero el armamento, valorado en el mercado ilícito en USD 15 000 cada arma, fue incautado el domingo 8 de junio durante un operativo. Al día siguiente -el lunes 9- una pareja fue asesinada al pie de un plantel educativo en Mucho Lote. Y en represalia por el doble crimen, se desataron los ataques.
El agente señaló que la facción de Los Tiguerones – que opera en Flor de Bastión- intenta apoderarse de Pascuales para las extorsiones. También operan Lagartos y Águilas en esa zona.
El distrito Pascuales es el tercero más violento de la zona 8 que comprende Guayaquil, Durán y Samborondón. De enero al 3 de junio de 2025, reportaba 189 asesinatos. Mientras que en el mismo periodo de 2024 se contabilizaban 100 casos.
¿Quién es alias Ñoco?
Alias Ñoco es considerado uno de los cabecillas en Pascuales. Alonso Francisco F.Z., tiene 29 años y está a punto de cumplir los 30 en julio de este año.
Antes del ataque en la salsoteca de Bastión Popular, fue retenido durante un operativo de control. Manejaba una moto en estado etílico, pero no fue detenido porque no había una boleta de captura en su contra ni tenía armas.
Durante el registro, los uniformados detectaron que portaba cadenas de oro. En uno de los bolsillos del pantalón, incluso tenía una placa de oro puro 20 detenidos por extorsión en Guayaquil salieron de prisión
La pugna entre bandas no solo en Pascuales sino en otras zonas como Nueva Prosperina, Flor de Bastión, centro, Samanes, etc., son además de la venta de droga, por las extorsiones.
Este delito se ha convertido en una fuente de financiamiento de los grupos criminales que está en una fase de fraccionamiento y atomización, según el experto en seguridad Renato Rivera. Sin embargo, pese a las denuncias, y viralización en redes sociales de ataques con explosivos en locales comerciales y viviendas, y a operativos y controles ejecutados por la fuerza pública, las extorsiones siguen.
Rivera explicó que se suele ver o analizar las denuncias de forma individual y no como un conjunto, por lo que se atrapa a uno o varios eslabones, pero no a toda la estructura.
Según datos del Ministerio del Interior, 960 personas han sido detenidas a escala nacional por extorsión o secuestro. Pero algunas quedan libres -como los dos implicados en el rapto de una comerciante china en Guayaquil.
Ecuavisa.com revisó el sistema de la Función Judicial y en dos meses, contabilizó al menos 20 personas implicadas en extorsiones que quedaron libres. De acuerdo a los reportes, el juez les dictó medidas cautelares no privativas como la prohibición de salida del país y presentaciones periódicas ante el fiscal del caso, además de arrestos domiciliarios.
En los reportes, constaba que los sospechosos usaban números de Ecuador, Colombia, Perú y México para mandar mensajes de amenazas a las víctimas. Algunas advertencias incluían fotos de familiares, armas y explosivos para exigir pagos iniciales que iban desde USD 2 000 hasta USD 100 000, además de cuotas semanales o mensuales de entre USD 100 a USD 500. Cruce de reproches entre autoridades por la ola criminal en Guayaquil
Las liberaciones o medidas alternativas dictaminadas por las autoridades judiciales, ha causado malestar no solo entre la Policía, también autoridades como el Ministerio del Interior.
Luego de conocerse que dos de los hombres que participaron en el secuestro de la comerciante china, cuyo cuerpo fue hallado en una cisterna con tres cadáveres más, desató acusaciones mutuas. El Consejo de la Judicatura se justificó que el juez encargado no dictó prisión por pedido de la Fiscalía.
La entidad respondió que sí lo hizo y fue decisión del juez no acoger el pedido de prisión preventiva. De su lado, el ministro John Reimberg, durante un operativo ejecutado el 7 de junio, señaló que no descartaría acciones contra fiscales o jueces.
Acusó que hay sospechosos a los que la Policía ha capturado hasta más de 10 veces y continúan en libertad. Por eso, fue enfático en llamar a jueces y fiscales para «sumarse al lado correcto de la historia», y no «seguir favoreciendo a delincuentes». Posteriormente, la Judicatura convocó a una mesa de seguridad para integrar acciones entre Judicatura, Fiscalía e Interior. Esto con la intención de “fortalecer la cooperación interinstitucional y unir esfuerzos en la lucha conjunta por la seguridad y la justicia”.
El ministro Reimberg, públicamente aceptó la convocatoria. Aunque todavía no se ha definido una fecha para la cita.