La veda del cangrejo en costas ecuatorianas había iniciado el 1 de febrero de 2025 y es una normativa para que la especie entre en etapa de precortejo y cópula.
La veda del cangrejo, medida implementada para la protección de las especies y su reproducción, llega a su fin en Ecuador este domingo 2 de marzo de 2025.
Esta normativa, que ha estado en vigor desde el 1 de febrero de este año, marca un respiro tanto para los ecosistemas marinos como para los pescadores locales, quienes a partir de esa fecha podrán reanudar la captura del cangrejo en todo el país.
El Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE), en conjunto con las autoridades pesqueras locales, ha trabajado de manera intensiva para asegurar el cumplimiento de esta veda, que busca preservar las poblaciones de cangrejo y evitar su sobreexplotación.
La veda se aplica especialmente a las especies de cangrejo rojo (Ucides occidentalis) y cangrejo azul (Callinectes sapidus), los cuales son de gran valor económico y cultural en las costas ecuatorianas.
¿Sabías que?
Mientras la veda no termine, pescadores y restaurantes tienen prohibido capturar o comercializar con el cangrejo pues hasta el fin de la restricción está prohibido «en todo el territorio nacional la captura, transporte, posesión, procesamiento y comercialización interna y externa» de la especie, según ha expresado el Ministerio de Producción.
Durante los tres meses de veda, los pescadores estuvieron limitados en sus actividades, lo que, aunque desafiante para la economía de algunas comunidades costeras, permitió que los cangrejos se reprodujeran de manera natural, asegurando la continuidad de estas especies.
A lo largo de este período, se registraron esfuerzos de monitoreo y patrullaje para garantizar que no se llevaran a cabo actividades de pesca ilegal.
El fin de la veda representa una oportunidad importante para los pescadores, quienes dependen de la recolección y comercialización del cangrejo para su sustento. Las comunidades costeras, especialmente en provincias como Manabí, Guayas y Esmeraldas, se preparan para la reactivación de la actividad pesquera, que impulsará tanto el empleo local como la economía de pequeños negocios que comercializan este marisco.
Este 2 de marzo marca el fin de la veda, pero también es el inicio de un renovado esfuerzo por parte de todos los actores involucrados para garantizar que la pesca del cangrejo siga siendo una fuente sostenible de ingresos y seguridad alimentaria para las comunidades ecuatorianas.