Hubo una época en la que la OTAN hacía esfuerzos por evitar mencionar directamente a Rusia cuando realizaba sus maniobras militares.
Soldados suecos participan en la primera prueba de los nuevos planes militares de la OTAN en respuesta a la invasión de Rusia a Ucrania.
Ahora, los ejercicios de la alianza se hacen con Moscú en la mente. Uno de los objetivos clave declarados del operativo Steadfast Defender (Defensor firme) es disuadir a Rusia.
Se trata de la mayor maniobra de la OTAN desde el fin de la Guerra Fría, con la participación de un personal militar compuesto por 90.000 personas y que tiene lugar a través del flanco oriental de Europa a lo largo de los próximos meses.
Steadfast Defender también es el primer ensayo de los nuevos planes militares de la OTAN, diseñados para desplegar tropas y equipos a una velocidad y escala que permitan apoyar a cualquier aliado bajo ataque. Y es una reafirmación del propósito de la OTAN: que un ataque contra un miembro generaría la respuesta de todos.
Donald Trump puede haber cuestionado ese propósito de la OTAN, pero Estados Unidos sigue siendo la columna vertebral del mismo.