El Bloque de Seguridad del Gobierno Nacional ha decidido restringir el acceso al Centro Histórico de Quito este lunes 25 de noviembre, debido a las manifestaciones convocadas en el marco del Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer.
La ministra del Interior, Mónica Palencia, anunció esta medida mediante un video oficial, reiterando que el estado de excepción en la capital se mantiene vigente.
Palencia solicitó a las organizaciones de derechos humanos actuar como observadores para prevenir la infiltración de personas violentas en la marcha.
Asimismo, dijo que es falso que la Corte Constitucional haya levantado el estado de excepción. «La Corte ha mencionado que contamos con medidas ordinarias para precautelar la seguridad de los ciudadanos, y no es necesario suspender el derecho a la libertad de asociación o de reunión», aclaró la ministra.
Medidas en Quito
El comandante general de la Policía Nacional, Víctor Zárate, señaló que, según información de inteligencia, las manifestaciones podrían extenderse a zonas donde no se permitirá el ingreso de personas.
«Queda restringido el acceso al Centro Histórico Patrimonial de Quito», enfatizó Zárate. Por lo que se establecieron las siguientes rutas de desvío para el tránsito vehicular:
Sentido norte-sur: Desvíos desde la avenida Patria hacia el oriente y occidente de la ciudad.
Sentido sur-norte: Cerrado a la altura del puente del Sena, avenida Maldonado, sector La Recoleta, con desvíos hacia la avenida Velasco Ibarra.
El comandante también destacó la participación de las mujeres en la Policía Nacional, quienes representan el 20% del personal, equivalente a 12 mil agentes.
«Nuestras servidoras realizarán el control, por lo que solicitamos respeto y consideración; es falta de respeto, hacer cánticos agresivos en contra de las fuerzas del orden. Pedimos a la Fiscalía y Judicatura que no se confunda la protesta social y su derecho, con la posibilidad de agredir a la Policía», señaló Zárate.
De su lado, Jaime Vela, jefe del Comando Conjunto de las FF.AA., acotó que es deber de las fuerzas del orden mantener la paz y seguridad interna del país, y defender todas las agresiones en uso legítimo de la fuerza.
Vela instó a no participar en actitudes provocativas en contra de las fuerzas del orden, con la intención de causar terror o hechos violentos.