Los arriendos no podrán subir de precio mientras dure la crisis eléctrica nacional. Es uno de los beneficios que consta en la Ley de Alivio Financiero, que fue aprobada por la Asamblea Nacional y luego sancionada favorablemente por el presidente Daniel Noboa.
La normativa, que ya está en vigencia desde el 9 de diciembre, dice que «se suspenderá la aplicación de cláusulas de incremento automático en la renovación de contratos de arrendamiento».
En otras palabras, si su contrato de arrendamiento está por vencer y lo quiere renovar, el arrendatario no puede subir el valor.
También aplica para nuevos contratos de arrendamiento sobre el mismo bien.
Esta ley aplica tanto en acuerdos entre privados como entre privados y el Estado.
La Ley de Alivio Financiero se planteó para ayudar a las economías de los hogares por las afectaciones que han provocado los apagones.