Las Fuerzas Armadas y el Ministerio de Defensa anunciaron este miércoles 10 de septiembre que se viene una «nueva fase en la guerra contra el narcoterrorismo», la cual incluye la «eliminación de cabecillas» criminales.
También consta la destrucción de maquinaria, combustibles e infraestructura usada en la minería ilegal, así como la neutralización de vehículos, bodegas y material vinculados al robo y contrabando de combustibles.
Además, se dará una «atención prioritaria» al control de las cárceles bajo responsabilidad de las Fuerzas Armadas. A esto le suman un pedido de los expertos: una depuración de los malos elementos.
Las acciones articuladas por los militares se concentrarán en tres ejes:
1) Control territorial y ofensiva directa
2) Fortalecimiento de la inteligencia y operaciones especiales
3) Neutralización y eliminación de objetivos.
Los operativos se concentrarán en las provincias «más críticas»:
Guayas Los Ríos Manabí El Oro Carchi Sucumbíos Orellana Zamora Chinchipe Morona Santiago
La reunión entre los altos mandos se desarrolló en Quito y participaron el General de Ejército Henry Delgado Salvador (jefe del Comando Conjunto), el General de Ejército Iván Vásconez Hurtado (Fuerza Terrestre), el Almirante Ricardo Unda Serrano (Fuerza Naval) y el General del Aire Mauricio Salazar Machuca (Fuerza Aérea).