El exvicepresidente Jorge Glas volvió a la cárcel La Roca en Guayaquil tras recibir una sentencia de 13 años de prisión por peculado en el caso Reconstrucción de Manabí. Su defensa alerta que el líder del correísmo corre riesgo “cierto e inminente”.
La abogada Sonia Vera García informó sobre el traslado, pero aclaró que “esta decisión constituye una violación directa a las medidas cautelares ampliadas otorgadas por la CIDH, las cuales expresamente prohíben mantenerlo en dicho centro penitenciario, en atención al grave riesgo que representa para su vida e integridad personal”.
Recordó que Glas estará en la misma cárcel en la que permanecen peligrosos criminales como alias Colón Pico y alias Fito, líderes de organizaciones criminales rivales (Los Lobos y Los Choneros), quienes han perpetrado hechos de violencia en el sistema penitenciario del Ecuador.
El traslado de Jorge a ese recinto lo expone a un riesgo cierto e inminente. Cualquier atentado contra la vida o la integridad personal de Jorge será responsabilidad directa e internacionalmente atribuible al Estado ecuatoriano”, advirtió la jurista
El exvicepresidente permanecía en la cárcel 4 en Quito mientras se desarrollaba el juicio por el caso Reconstrucción de Manabí, cuyo resultado fue la sentencia de 13 años de cárcel para él y Carlos Bernal, exsecretario del Comité de Reconstrucción, por el delito de peculado.
La Fiscalía logró comprobar que los procesados ejecutaron un perjuicio de 225 millones de dólares, al realizar obras no prioritarias para socorrer a los afectados por el terremoto del 2016 en Manabí y Esmeraldas.
“Abusó de los fondos públicos recaudados mediante la Ley Orgánica de Solidaridad, destinados exclusivamente a la reconstrucción de zonas afectadas”, apuntó el Ministerio Público.
Es así que los jueces impusieron 13 años de cárcel para los dos procesados y el pago de una multa proporcional de 60 salarios básicos unificados (más de 28.000 dólares ), así como una reparación integral de 250 millones de dólares.