El sujeto se defenderá en libertad luego de que una jueza aceptó las medidas cautelares pedidas por la Fiscalía.
C. S., el guardia del aeropuerto de Quito acusado de robo, habría provocado un perjuicio de miles de dólares al sustraer diversos objetos en la zona de transferencia de carga internacional. Sin embargo, el sujeto quedó en libertad luego de que la Fiscalía pidió medidas cautelares en la audiencia de flagrancia.
El caso surgió a inicios de julio de este año, cuando cuatro importadores de artículos electrónicos presentaron cartas de reclamo porque su carga llegó incompleta o las cajas estaban perforadas.
Tras conocer de este hecho, la empresa Tababela Cargo Center (TCC) solicitó la intervención de la Policía Nacional. Gracias a su sistema de trazabilidad con cerca de 300 cámaras, los uniformados ejecutaron un monitoreo de varios días hasta que la madrugada del domingo 20 de julio detuvieron al guardia.
“Determinaron que una persona, que brindaba seguridad en una de las empresas que opera en el aeropuerto para bajar la carga de los aviones, presentaba actividades inusuales en el momento de realizar la custodia”, comentó Bernardo Sevilla, gerente de TCC, a Vistazo.
ASÍ OPERABA EL GUARDIA
La Policía determinó que C. S. perfilaba los objetos de valor para romper las seguridades y sustraer los artículos.
Por su parte, Bernardo Sevilla narró que normalmente los guardias que retiran el cargamento de los aviones deben custodiar la mercadería hasta que llegue personal de TCC, que luego transporta los objetos a bodegas.
Sin embargo, el sospechoso “se acercaba a la carga, tocaba, se escondía dentro de los bultos y drenaba los equipos”.
“Luego se dirigía a los baños e incluso venía con una especie de mochila para guardar los objetos. Tenía tanta experiencia que luego de realizar las perforaciones, las tapaba con las mismas etiquetas y embalajes de carga”, detalló Sevilla.
La Policía detuvo al guardia en flagrancia y le encontró varios objetos irregulares no solo ese momento de la requisa, sino también en una vivienda en Puembo.
En total fueron seis laptops, una tablet, 38 celulares, 26 accesorios y varias prendas de vestir. El perjuicio alcanzaría los miles de dólares.
Sevilla indicó que este “es un caso excepcional”, ya que en años anteriores no se han reportado casos similares e instó a los usuarios del aeropuerto que presenten un reclamo en caso de detectar alguna irregularidad en su equipaje o cargamento de importación.
GUARDIA QUEDÓ LIBRE
Tras ser detenido en flagrancia, C. S. fue puesto a órdenes de la autoridad competente y los indicios asociativos fueron ingresados en el Centro de Acopio de Indicios y Evidencias de la Policía Judicial del Distrito Metropolitano de Quito con la debida cadena de custodia para las pericias e investigaciones correspondientes.
No obstante, el lunes 21 de julio, el guardia quedó en libertad, según consta en el sistema de la Función Judicial.
La Fiscalía solicitó las medidas cautelares de prohibición de salida del país y presentaciones periódicas los viernes de cada semana hasta que termine el proceso.
El pedido fue aceptado por una juez y dispuso la liberación del acusado. “Esta autoridad califica como pertinente la actuación de Fiscalía por estar apegada a principios constitucionales y legales”, dice la resolución.
La instrucción fiscal durará 20 días. La audiencia de procedimiento directo quedó definida para el 11 de agosto.
Además, la magistrada dictó que el guardia tiene prohibido enajenar bienes, lo que significa que no puede vender o transferir sus pertenencias.