Al menos 15 víctimas ya habrían pagado montos entre 3 000 y 5 000 dólares.
Una organización delictiva dedicada a la extorsión y el secuestro fue desarticulada en Machala tras un operativo de gran escala ejecutado por la Policía Nacional. Las investigaciones revelan que los delincuentes exigían entre 5 000 y 10 000 dólares a comerciantes locales bajo amenazas de muerte y ataques con explosivos. Además, utilizaban cuentas bancarias obtenidas con engaños para recibir el dinero, el cual luego era transferido al extranjero.
La operación movilizó a 200 agentes policiales que allanaron 30 viviendas en distintos sectores de la capital orense. Como resultado, se detuvo a 14 personas, entre ellas ciudadanos ecuatorianos y extranjeros.
De acuerdo con la Policía, varios de los aprehendidos estarían involucrados en ataques armados y atentados con explosivos contra locales comerciales cuyas víctimas se habían negado a pagar las sumas exigidas.
El inspector general de la Policía Nacional, Víctor Herrera, informó que se investiga la participación de dos grupos criminales conocidos como Los Lobos y Los Sao Box. También señaló que las autoridades trabajan en conjunto con entidades bancarias para rastrear las llamadas «cuentas fantasmas» y cuentas alquiladas que usaban los delincuentes para canalizar los depósitos obtenidos mediante extorsión.
Durante el operativo, se decomisaron vehículos, motocicletas, fusiles, pistolas nueve milímetros, 24 teléfonos celulares y numerosos comprobantes de transferencias bancarias.
Cinco de los detenidos registran antecedentes penales por estafa, robo, apropiación fraudulenta y delincuencia organizada. Según William Calle, comandante policial de El Oro, al menos cuatro comerciantes denunciaron haber recibido amenazas de muerte si no entregaban el dinero solicitado.
El comandante Calle explicó que la estructura criminal operaba mediante tareas asignadas: unos miembros identificaban a las víctimas y obtenían sus datos personales bajo el pretexto de ayudarlos a acceder al bono solidario del Gobierno; otros creaban cuentas bancarias a nombre de esas personas y, posteriormente, iniciaban las amenazas y exigencias económicas. Al menos 15 víctimas ya habrían pagado montos entre 3 000 y 5 000 dólares.
Los 14 detenidos fueron trasladados al Comando de la Policía de Machala y esperaban por la instalación de la audiencia de formulación de cargos.
Según datos de la Policía Nacional, de enero a la fecha se han registrado al menos 65 ataques con explosivos en locales comerciales y viviendas de Machala.